Bonao, República Dominicana – La comunidad de Bonao está en estado de conmoción y angustia tras una repentina crecida del Río Fula donde todavía se continua la búsqueda de la joven desaparecida en un hecho en el que también perdieron la vida 4 personas, incluyendo una niña de 13 años.
La desaparecida Isauly Martínez de 24 años, al momento de la tragedia supuestamente se encontraba compartiendo con un enamorado y sus familiares, quedando sus parientes angustiados y en estado de chock que quedó tras un día de disfrute que se convirtió en una película de terror.
A raíz de la desaparición de la joven Isauly Martínez, Juan Carlos Velasquez, director provincial de la Defensa Civil, informó que se han desplegado cuatro brigadas de búsqueda y rescate en un esfuerzo desesperado por encontrarla.
Los familiares de la desaparecida a pesar de la angustia y el temor, mantienen al menos la esperanza de encontrarla en un intento por guardar la calma.
Mientras tanto, la tristeza abruma a los familiares de las víctimas ya identificadas, entre las que se encuentran Adonis Custodio de 25 años, Cheily Pérez, también de 25 años, Yisneidy Vásquez de 29 años y su hija Jade Contreras de 13 años.
El trágico suceso ocurrió pasadas las 7 de la noche del martes 7 de noviembre, tomando por sorpresa a quienes se encontraban en el río en ese momento.
Juan Ramon Rosario, director del consejo ecoturístico de la provincia Monseñor Nouel, junto con las autoridades encargadas de administrar el lugar, revelaron que esta no es la primera vez que ocurren incidentes de este tipo.
Asimismo dijo que aunque se han tomado medidas de seguridad, las personas no siempre las acatan, a menudo debido al consumo de alcohol y el disfrute.
Destacó que por esta razón, se han llevado a cabo varias reuniones con el objetivo de fortalecer las medidas de seguridad y protección del área para prevenir incidentes similares en el futuro.
El representante del Ministerio de Medio Ambiente, Franklin Batista, también confirmó que hace aproximadamente 30 días se llevó a cabo una reunión con la Policía Nacional, la Defensa Civil y los propietarios de negocios en la zona con el fin de establecer reglas y protocolos para los bañistas que visitan el lugar, además de implementar sistemas de alerta temprana para prevenir tragedias como la que ha sacudido a Bonao.
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