República Dominicana-Al igual que en otras tantas ocasiones, las lluvias de los últimos días recrudecieron el drama humano de quienes, en humildes casitas mal viven, en la ribera del río Ozama en el sector Las Lilas en Santo Domingo Este.
El simple hecho de nublarse es motivo de preocupación para quienes durante décadas han tenido que soportar los embates del legendario y contaminado río Ozama.
La noche de este domingo los residentes en esta rivera se vieron obligados nueva vez, abandonar sus casas para poder salvar la vida, ante las inundaciones provocadas por las lluvias y la crecida del río.
Lo vivido por los moradores en Las Lilas anoche, es una historia tan repetida como las promesas de unas autoridades que solo los recuerdan en tiempos de campaña política y salen a buscar los votos.
Cansados del desasosiego que les genera cada temporada de lluvias, además de las enfermedades respiratorias producto de la contaminación, los residentes en la orilla del río piden al presidente Luis Abinader cumplir su promesa de sacarlos del lugar en él durante décadas han sobrevivido, tal como lo hizo con los moradores en La Ciénaga.
Indignados ante el abandono al que han sido sometidos, estos hombres y mujeres de trabajo amenazan con ir a votar hasta le resuelvan el problema, que se suma a la falta de energía eléctrica, agua potable y otros servicios básicos.
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