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SANTO DOMINGO.- La apertura de una nueva plaza de parqueos ubicada en las inmediaciones de la Zona Colonial ha generado malestar entre comerciantes y residentes de la calle Mella, quienes denuncian que desde el pasado primero de agosto no se les permite estacionarse frente a sus propios negocios, lo que aseguran afecta su actividad económica y laboral.

La medida fue implementada sin previo aviso, según relatan los afectados, quienes también critican el costo de 100 pesos por hora para utilizar el parqueo, una tarifa que califican de abusiva, especialmente en una zona donde han operado por décadas con libre acceso a espacios públicos.

"Nosotros tenemos 10 años con ese negocio ahí. De repente llegan una gente y construyen un negocio ahí…. pero de repente llegan y pintan la acera de amarillo y dicen ¡No, usted no se puede parquear ahí!", expresó Luis Suarez, empleado en una empresa afectada.

“Nos quitaron el derecho al parqueo sin consultarnos ni ofrecer alternativas”, fue el sentir común de los trabajadores y propietarios de establecimientos, quienes aseguran que ni siquiera pueden detenerse brevemente para entregar mercancías o recoger productos.

El estacionamiento, que tuvo una inversión de 16 millones de dólares y es operado por una empresa panameña, ha despertado preocupación sobre el acceso equitativo a los servicios en una zona históricamente habitada y trabajada por familias dominicanas. Algunos denunciaron que se están privilegiando los intereses comerciales de la concesionaria por encima del bienestar de la comunidad.

Los comerciantes hicieron un llamado al presidente Luis Abinader para que intervenga directamente en la situación y facilite un acuerdo que permita a los residentes y trabajadores seguir utilizando la calle Mella como zona de carga y descarga sin que esto implique el pago obligatorio por hora en la nueva plaza.

"Abinader tiene que tomar en cuenta que nosotros pagamos impuestos y que eso se hizo con impuesto de nosotros", expresó Carlos Antonio Rodríguez, encargado en una las empresas en la calle Mella.

Mientras tanto, las tensiones continúan creciendo en el área, con negocios reportando disminución en las ventas y empleados que afirman no poder costear el nuevo sistema de parqueo para cumplir con sus jornadas laborales.