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SANTO DOMINGO.- A ocho meses del desplome del techo del centro de diversión nocturno Jet Set, que dejó más de 236 personas fallecidas, ciudadanos, familiares de las víctimas y organizaciones religiosas mantienen vivo el reclamo de justicia, en medio del dolor que se profundiza al enfrentar la primera Navidad sin sus seres queridos, mientras el proceso judicial, aseguran, avanza con una lentitud que hiere la memoria de los caídos.

Cada día 8 de mes, la Diócesis Padre Montesinos celebra una misa en las inmediaciones de las ruinas que aún permanecen en el lugar de la tragedia. En esta ocasión, el acto religioso estuvo marcado por la exigencia de respuestas claras y sanciones, ante lo que consideran negligencia de los responsables del establecimiento.
En ese sentido, el padre Marino Alcántara señaló que las víctimas no murieron por un accidente fortuito, sino por fallas que pudieron evitarse.
“Hoy nosotros como diócesis decimos, ¿y estos no son hombres y mujeres dominicanos y hasta extranjeros que murieron aplastados aquí? por la negligencia de unos propietarios que solo se concentraron en hacer dinero y ante todos los indicios que esta construcción dio de que se estaba desbaratando, persistieron en seguir manejándola así”, expresó Alcántara.

La indignación también se percibe entre transeúntes que a diario circulan por la zona, quienes consideran que la tragedia ha sido relegada al olvido, al igual que el sufrimiento de los familiares de las víctimas.
“Claro que se ha olvidado, mira cómo lo tienen abandonado eso ahí… deberían poner algo bonito ahí yo diría”, comentó Cristoffer Rosario.
Por su parte, Josefa Acosta manifestó: “Yo creo que ya se olvidaron de eso… hasta yo misma cogí una depresión grandísima”.

Otros ciudadanos insisten en que el caso debe llegar hasta las últimas consecuencias. “Yo entiendo que eso deben llevárselo hasta las últimas consecuencias porque fueron muchas víctimas”, sostuvo Julián Peña.
Mientras que Danilo Núñez expresó suspicacia sobre el proceso judicial: “Algo tienen que haber dicho ya, pero hay muchas gentes poderosas… ahí hasta el gobierno está metido porque le prestó el abogado para que lo defendiera”.

El padre Marino Alcántara coincidió con el sentir de la ciudadanía, al considerar que el Ministerio Público ha tratado el caso al paso de un suero de miel de abeja, razón por la cual reiteró el llamado a una justicia inmediata, no solo para honrar a quienes perdieron la vida, sino también para dar alivio y respuestas a sus familiares sobrevivientes.